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¿Imaginarios Imaginados?

América Latina: Identidad regional en afiches de propaganda de eventos académicos y políticos (2008-2013)
Imaginarios imaginados? América Latina: Identidade regional em cartazes de propaganda de eventos acadêmicos e políticos (2008-2013)
Imagined Imaginaries? Latin America: Regional identity in propaganda posters of academic and political events (2008-2013)
Imaginaires imaginés ? Amérique latine : Identités régionales dans les affiches de propagande d'événements universitaires et politiques (2008-2013)
Nelsa Grimoldi

Resumos

Neste trabalho nos propomos a abordar os imaginários geográficos sobre a América Latina a partir de imagens cartográficas usadas em cartazes de propaganda e difundem imaginários latino-americanos. O corpus de imagens consta de mais de uma centena de mapas que aparecem em cartazes destinados a promover eventos, coletados entre 2008 e 2013 na cidade de La Plata (Argentina). A hipótese que fundamenta esta investigação é que os cartazes de eventos acadêmicos e políticos que apelam ao “latino-americano” utilizam alguna forma cartográfica para expresar ideias associadas à região. Esse artigo procura identificar as estratégias e as linguagens visuais que mobilizam o senso comum geográfico em torno do que seria a identidade latinoamericana.

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1. Introducción: imaginarios geográficos latinoamericanos y cultura visual

En nuestra América, donde el analfabetismo comenzó a ser minoritario hace pocos años y no en todos los países, no es extraño que la cultura haya sido predominantemente visual. Ser culto, entonces, es aprehender un conjunto de conocimientos, en gran medida icónicos, sobre la propia historia, y también participar en los escenarios donde los grupos hegemónicos hacen que la sociedad se dé a sí misma el espectáculo de su origen. (García Canclini, 2012: 159)

1Es por ello que García Canclini propone la explicación de las formas de organizaciones sociales, también formaciones ideológicas e identitarias, a través de las construcciones visuales y su interpretación. Este es un enfoque como el que propone Nicholas Mirzoeff, para quien la cultura visual es "un lugar en el que se crea y discute los significados" (Mirzoeff, 2003: 24), y más:

una táctica para estudiar la genealogía, la definición y las funciones de la vida cotidiana posmoderna desde la perspectiva del consumidor, más que de la del productor (…) [La] cultura fragmentada que denominamos posmoderna se entiende e imagina mejor a través de lo visual. (Mirzoeff, 2003: 20)

2¿Es posible indagar esa cultura visual de la que habla Mirzoeff para explorar los imaginarios geográficos de Nuestra América en el sentido definido por Canclini examinando mapas?

3Habitualmente se entiende que una de las funciones de los mapas es representar la realidad a través de la imagen, pero diferentes estudios recientes vienen problematizando la naturaleza cartográfica (Harley, 2001; Lois, 2009; Edney, 2019). Como punto de partir para validar este tipo de mapas vale tomar en cuenta las reflexiones de Brian Harley, quien apuesta a identificar las reglas referidas al orden social dentro del mapa y explica que debemos prestar especial atención en lo que no se nos muestra o lo que está oculto a simple vista (Harley, 2001). Más recientemente, la historiadora de la cartografía Carla Lois, ha afirmado que el mapa es una imagen que permite conocer y superponer estructuras de conocimiento para visualizar las relaciones espaciales que establecen diversos elementos entre sí. También dice que existen mapas persuasivos “emparentados con otras imágenes que buscan deliberadamente influir en el lector. Si esos elementos representados en el mapa no son de naturaleza necesariamente espacial, se dice que el mapa, más que una representación entendida en cualquiera de sus acepciones clásicas, es una metáfora. Se trata de “una metáfora que crea un espacio” (Lois, 2014: 18), es decir, “mapas fuera de la cartografía” (Lois, 2009: 12).

  • 1 Con preguntas afines a las que desarrollamos en este trabajo, Alfredo Guerrero Tapia analizó el ima (...)
  • 2 El corpus de imágenes consta de un total de 109 mapas que aparecen en afiches que promocionan event (...)

4En este trabajo proponemos abordar los imaginarios geográficos de América latina a partir de imágenes cartográficas que no suelen ser consideradas científicas.1 Se trata de mapas que aparecen en afiches de propaganda. El objetivo principal de esta investigación es explorar los imaginarios latinoamericanos que expresan ciertas imágenes cartográficas que circulan en la vía pública. La hipótesis que articula esta indagación es que los afiches de eventos académicos y políticos que apelan a “lo latinoamericano” usan alguna forma cartográfica para expresar las ideas asociadas a la región. A partir de la selección de un centenar de imágenes procuramos indagar cuáles son las estrategias y los lenguajes visuales que movilizan el sentido común geográfico en torno a lo que sería la identidad latinoamericana.2

5El corpus de imágenes consta de más de un centenar de mapas que aparecen en afiches que promocionan eventos, recolectados entre los años 2008 y 2013 en la ciudad de La Plata, aunque también se incorporaron otras imágenes afines al corpus y correspondientes al mismo periodo. Sabemos que los autores o responsables de los afiches incluyen un abanico diverso, conformado por múltiples actores: agrupaciones políticas, sociales, estudiantiles, casas de estudio, organizaciones culturales, organismos o dependencias del estado nacional y extranjero.

2. ¿Región latinoamericana? Un rompecabezas con múltiples soluciones

6Si la región es un ámbito en cuyo interior se cumplen ciertos requisitos de semejanza u homogeneidad tal como menciona Palacios (1983), este artículo busca identificar cuáles son las semejanzas y las homogeneidades que promocionan esos afiches. Dentro de la geografía fenomenológica la noción de región está asociada a la subjetividad de los individuos. La región es aquí un espacio vivido como un ámbito de identidad, que se construye con representaciones sociales, que pudo haberse moldeado con la enseñanza escolar, con los medios de comunicación, en la cartografía, etc.

7Los problemas para pensar América latina como región aparencen rápidamente cuando intentamos establecer el recorte geográfico de referencia. En un principio, parece bastante obvio y preciso pero en realidad no lo es; más bien se ha ajustado a diversas necesidades, propósitos y contextos.

8Desde una perspectiva basada en el criterio de orden físico, la región suele extenderse desde del río Bravo, que separa Estados Unidos de Norteamérica de México. Esta concepción se encuentra reforzada por otra cuestión física (en este caso, orográfica): la unidad geográfica dada por el eje montañoso andino que se desarrolla desde el sur de Argentina y Chile hasta México, transformado en la Sierra Madre (aunque, en realidad, se omite su continuación en las Rocallosas del hemisferio norte).

9Cuando el criterio es cultural, uno de los primeros parámetros que es tenido en cuenta para dar homogeneidad a la región es el idioma de raíces latinas. También la historia, la idea de un origen común y la experiencia de dominación colonial.

10Un rasgo indiscutible de la región está dado por la multiculturalidad, en este caso debido a la coexistencia de diversas culturas, razas, etnias idiomas y religiones. Esta característica junto al mestizaje podría determinar un modo de identidad latinoamericana. Y denota que no hay una única forma de ser latinoamericano, sino varias y todas forman parte de una misma región. Lo cierto es que la región además de ser un mosaico de etnias lo es también de estados nacionales.

11Los criterios económicos y políticos han servido para recortar la región con argumentos más contemporáneos, y suelen remitir a convenios tales como el Mercosur, ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), CAN (Comunidad Andina de Naciones), CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) y Petrocaribe, por nombrar algunos.

12Lo cierto es que, por un lado, tanto el caso físico como el cultural tienen posiciones encontradas y discutidas. Y, por otro, todos los criterios se superpuesto en más de una ocasión siempre y cuando pudieran ser utilizados para pensar la región como un todo.

3. Topónimos regionales: formas de nombrar, formas de crear geografías. Una reflexión sobre su etimología y los usos que se hacen de los nombres

13Ahora bien, hablamos del recorte geográfico pero también debemos considerar la forma de nombrar a la región: América latina, Latinoamérica, Iberoamérica, Indoamérica, Hispanoamérica, Patria Grande, por sólo nombrar los más recurrentes.

14Previsiblemente, los nombres usados más frecuentemente son: “América Latina” (27,5 %) y “Latinoamérica” (67 %). No sorprende el alto porcentaje considerando que los productores de estos afiches son generalmente actores regionales. En un 9 % el mapa aparece totalmente desprovisto de topónimos, es decir, no se hace mención alguna a ningún tipo de denominación o nombre de la región. Una denominación que en la actualidad está relacionada con dirigentes políticos es la de “Patria Grande”, encontrada en 3,7 % de la muestra. En unos pocos casos encontramos las designaciones “Latinoamérica y el Caribe” (tres afiches) y “América Latina y el Caribe” (dos afiches). Esta denominación establece con claridad que excluye al Caribe de la región Latinoamericana o de América Latina, según el caso.

15Hay algunos casos únicos, en los que la forma de nombrar la región se registra solamente en un afiche: son los casos de “Pueblo Liberado”, “Hispanohablantes”, “Regiones Andinas”, “Iberoamérica”. Los afiches no suelen mencionar nacionalidades sino que, más bien, se concentran en el tema a promocionar. En concordancia con los perfiles institucionales o ideológicos de los afiches predominan símbolos y signos que denotan una reivindicación de los valores culturales tradicionales y populares, como así también ideas antiimperialistas y/o antiliberales. América latina es un término que se evoca con intenciones específicas, generalmente de cortes políticos y contestatarios.

16Ya sea por razones geográficas o por cuestiones históricas el nombre de la región ha ido adquiriendo variantes de acuerdo con los diversos períodos políticos y sociales. Si nos remontamos al período de la llegada de los españoles se comenzó a nombrar a la región como “las Indias Occidentales”, o también denominada “Nuevo Mundo”. Luego fue llamada “América”, en honor a Américo Vespucio – nombre sugerido por Martin Waldseemüller, que menciona por primera vez el nombre en su mapa llamado “Universalis Cosmographia” en 1507 (Lois, 2008). A medida que se iban conquistando nuevos territorios, estos iban siendo rebautizados con distintos nombres relacionados a otros ya existentes en Europa, con el adjetivo “Nueva” delante, como por ejemplo “Nueva Granada” a la zona de los siguientes países: Colombia, Ecuador, Venezuela y Panamá y parte de Perú y de Brasil; “Nueva Castilla”, a lo que hoy conocemos como Perú y Ecuador; “Nueva Andalucía”, denominación que le fue otorgada a la actual Sucre (Lois 2008).

17En el año 1891, José Martí publicó un ensayo titulado Nuestra América (Martí, 2012), en el que analiza el contexto histórico por el que estaban pasando los pueblos de América que luchaban por su independencia, no sólo de Europa sino también del imperialismo de América del Norte, precisamente Estados Unidos (de hecho, uno de los temas mencionados en el ensayo se titula “Aldeanismo o Regionalismo”). En este ensayo comenzó a germinar la idea de unidad de los pueblos hispanoamericanos y a buscarse la identidad a través de la recuperación del nombre “América”, que él denunciaba como apropiado por Estados Unidos. Se refiere a la región como “Madre América” (no casualmente tituló su ensayo “Nuestra América”). Martí decía que “no hay odio de razas, porque no hay razas” (Martí, 2012: 58), y para sostener esta afirmación utiliza la expresión “América Latina”. En ella deseaba señalar la integración que se pretendía de los pueblos americanos frente a Estados Unidos, Así lo expresa en un párrafo: “Todo nuestro anhelo está en poner alma a alma y mano a mano los pueblos de nuestra América Latina” (Martí, 2012: 399). La idea de América de Martí surge en contraposición con las planteadas por otros personajes contemporáneos que tenían una posición europeizante en cuanto a la posesión de colonias en América. Al mencionar “Nuestra América” y “Madre América”. El autor intenta hacer una revalorización de los pueblos que habitaban América antes de la llegada de los españoles, intenta priorizar en su relato como integrantes de América a las razas que prevalecían antes de la conquista, como los mayas, incas y aztecas.

18Las problemáticas del idioma aparecen involucradas en los modos de construir nombres para mencionar la región. La expresión “latina” hace referencia a las lenguas romances, que son las derivadas del latín (italiano, francés, español, portugués, catalán, entre las más importantes). Frente a la aparente indiferencia por las tradiciones de las lenguas de los pueblos originarios, el político peruano Víctor Raúl Haya de la Torre designa a la región con el nombre de “Indoamérica”. Si bien esta expresión no fue usada por los pueblos originarios, sí lo hicieron algunos escritores y pensadores, tales como el ecuatoriano Luis Monsalve Pozo en su libro Indoamérica del año 1934, y el escritor y filósofo chileno Alejandro Lipaschütz que publicó un libro titulado Indoamericanismo y Raza India en el año 1937.

19“Hispanoamérica” fue usado para hacer referencia a los países de habla hispana como idioma oficial. Esta designación ha sido muy criticada por diversos motivos, uno de ellos es que no se toma en cuenta las lenguas indígenas. Otro motivo de descrédito para el término Hispanoamérica es que ha sido retomado por intelectuales y políticos de la región simpatizantes con el régimen franquista, cuando en 1940 se crea en España el Consejo de la Hispanidad, con la intención de controlar que las ideas provenientes del marxismo no se diseminaran en el “Nuevo Mundo”. En ese contexto, preferían esta expresión a la de América Latina que era asociada, por este Consejo y sus referentes en la región, con movimientos revolucionarios inspirados en la Revolución Francesa. El origen peninsular de la colonización en Sudamérica se condensa en la denominación “Iberoamérica”, que incluye a Brasil, aglutina las naciones independizadas de España y de Portugal.

20El historiador Walter Mignolo propone una línea de pensamiento relacionada con lo poscolonial y la modernidad, el descubrimiento y la invención, para analizar la historia de América y América Latina. Afirma que desde Europa y las grandes potencias del mundo se refieren a América como un descubrimiento, mientras que en la misma América, desde un punto de vista desde la colonialidad, se sostiene la idea de una invención porque, como él dice, “hoy en día resulta difícil pensar que los Incas y los Aztecas no vivían en América y más aún que no vivían en América Latina” (Mignolo, 2005: 28). Más adelante el autor continúa: “lo confuso del asunto es que una vez que el continente recibió el nombre de América en el siglo XVI y que América Latina fue denominada así en el siglo XIX, fue como si esos nombres siempre hubiesen existido” (Mignolo, 2005:28).

21Es por ello que genera confusión la búsqueda de una primera mención del término América Latina como forma de nombrar la región. El haber naturalizado el nombre, sin ni siquiera adentrar en su significado, sin saber los sectores que se abarcaban, pasó a formar parte del inconsciente colectivo.

22Existe una temprana referencia al concepto de América Latina en los trabajos de sociólogo francés Michel Chevalier en el siglo XIX, donde la expresión es usada para justificar la expansión de Francia hacia los países de América del Sur. Según el autor:

hay la Europa Latina y la Europa Teutónica; la primera comprende los pueblos del mediodía; la segunda, los pueblos continentales del norte e Inglaterra. Esta es protestante, la otra es católica. Una se sirve de idiomas en los que domina el latín, la otra habla de lenguas germanas. Las dos ramas, latina y germana, se han reproducido en el nuevo mundo. América del Sur es, como la Europa meridional, católica y latina. La América del Norte pertenece a una población protestante y anglosajona. (Chevalier, 1853: 145)

23De esta manera, el autor expresaba la justificación de una cierta afinidad con los países que Francia pretendía conquistar.

24Walter Mignolo, además, sugiere que el modo en que se combinan los términos “América” y “latina” determinan diferentes significados: si la expresión referida a latinidad se ubica en el vocablo final, es decir, si se menciona “América Latina”, hay una connotación más relevante en América; en cambio, si se menciona “Latinoamérica”, lo que prima era la latinidad.

25Previsiblemente los nombres usados con más frecuencia son: América Latina y Latinoamérica, como se aprecia en los afiches que promocionan un seminario internacional sobre educación superior (Figura 1 - A) y un concurso para estudiantes de diseño de moda (Figura 1 - B), aunque en algunos afiches el mapa aparece totalmente desprovisto de topónimos, es decir que no se menciona ningún nombre (afiche sobre el curso de postgrado sobre derecho y economía del cambio climático, en la figura 1 - C). En otros casos se recurre, como mencionamos anteriormente, la denominación Patria Grande, por ejemplo, en el afiche de un congreso sobre Malvinas (Figura 1 - D). En casos puntuales encontramos otras formas de nombrar la región: pueblo liberado, hispanohablantes, regiones andinas nuestramérica e Iberoamérica (Figura 2 - A e B). No siempre queda claro si los topónimos incluyen el Caribe y, de hecho, la incorporación del Caribe es un asunto ambiguo: en algunos casos, el Caribe aparece dentro de la silueta cartográfica y el título del afiche da cuenta de ello (Figura 2 - C), pero en otros se omite la región (Figura 2 - D).

Figura 1. Topónimos de la América Latina

Figura 1. Topónimos de la América Latina

Figura 2. Topónimos: América Latina y Caribe

Figura 2. Topónimos: América Latina y Caribe

26Son pocos los casos que muestran alguna delimitación física o política interna. En general, eso ocurre cuando se quiere destacar gráficamente el protagonismo del país convocante; sin embargo, aun en esos casos, no se trata de recortar el país en cuestión sino de integrarlo y presentarlo como parte de la unidad de la región (Figuras 3 y 4).

Figura 3. Remarcación física del país convocante

Figura 3. Remarcación física del país convocante

Figura 4. Delimitación física y color uniforme

Figura 4. Delimitación física y color uniforme

4. Tópicos: identificación del elenco iconográfico

27A pesar de la diversidad de los temas promocionados en los afiches, se puede identificar un elenco relativamente estable de tópicos relacionados con el imaginario geográfico de América latina que intentan proyectar y a partir del cual pretenden establecer cierta empatía con el público al que están dirigido. Esos tópicos son: la fuerza, la identidad regional, la historia común, naciones, ideales y tensión norte-sur.

4.1. La fuerza: puños y manos

28Este tipo de afiches hace referencia a cuestiones políticas, sociales o económicas, con cierta proyección histórica en cada caso, asociadas habitualmente al cambio social y a la educación popular.

29Uno de tópicos que caracteriza a las imágenes es el del mapa con elementos tales como manos, puños, saliendo del interior de la tierra, de las entrañas, como metáforas de trabajo, fortaleza y resistencia (afiches del congreso de estudiantes de filosofía, en la figura 5 - A, y de la mesa redonda organizada por los jóvenes del bicentenario en la figura 5 - B). También filiado con esa idea de un surgimiento de las entrañas de la tierra, en el afiche del evento sobre geografía crítica (Figura 5 - C) se representan raíces y árboles surgiendo desde la base; en este caso se trata de un congreso de Geografía que tiene las consignas de “Territorialidad, Espacio y Poder”.

  • 3 Libro del escritor uruguayo Eduardo Galeano publicado en 1971 y que tuvo decenas de ediciones.

30Los ejemplos se multiplican y se pueden encontrar casos como el afiche que publicita un seminario sobre Las Venas Abiertas de América Latina,3 donde brazos y puños afloran desde un mapa (Figura 5 - D).

Figura 5. Brazos, puños, manos y raíces latinoamericanas

Figura 5. Brazos, puños, manos y raíces latinoamericanas

31Otra manera de remitir a la fuerza o a la fortaleza de América latina está asociada a la unidad o a la unión de las partes. Se intenta representar una idea de fortaleza de la región, acompañado con la moción de que Latinoamérica está de pie y un permanente resurgir y transformarse. Tampoco es casual ver ese tipo de imágenes acompañadas por una afirmación de la región como por ejemplo cuando se hacen las menciones de: “Ahora”, “de pie”, “transformación”, “Ahora o nunca”.

32En la figura 6, el afiche que promociona un congreso de educación ambiental, la mano representa al mapa que surge desde un punto en el sur que echó raíces. En la figura 7, el afiche donde se clama por la creación del ALBA, un ramillete de manos contiene en el centro la figura traslucida del mapa de la región. En este afiche se sugiere, sobre todo, la integración a partir del encuentro colaborativo y fraterno, con la leyenda “Por la unidad y liberación de los pueblos latinoamericanos”.

Figura 6. La mano simboliza el mapa que surge desde las raíces

Figura 6. La mano simboliza el mapa que surge desde las raíces

Figura 7. Desde el sur, brazos estirados son la base del mapa

Figura 7. Desde el sur, brazos estirados son la base del mapa

33A veces los mensajes que transmiten los afiches no son tan claros o evidentes como parecen a simple vista; por ejemplo, en el afiche que invita a una conferencia referida a la legalización del aborto en América Latina (Figura 8), hay dos manos apoyadas en un vientre (que está representado una parte del mapa de la región) gestando un embarazo avanzado. Este tipo de mensajes contradictorios entre el tema del evento y la gráfica sirve para mencionar una cuestión metodológica que atraviesa toda esta pesquisa: muchas veces los diseños son el resultado de la participación de varios actores, no todos ellos involucrados o directamente familiarizados con la intención del evento. Esto debería ser tenido en cuenta para evitar la sobreinterpretación de los materiales, ya que no puede adscribírseles siempre una intencionalidad deliberada a todas las imágenes. Es por eso que aquí optamos por tomar sólo aquellos tópicos que, por ser recurrentes, son tomados como síntomas de un imaginario geográfico relativamente estable sobre la región.

Figura 8. Las manos apoyadas en el vientre representan el mapa de la región

Figura 8. Las manos apoyadas en el vientre representan el mapa de la región

4.2. Identidad: rostros y atuendos

34Una concepción que trata de resaltar la identidad regional remite a la imagen de un conglomerado de etnias. En el afiche referido al “Foro por la Unidad Latinoamericana” la imagen del mapa, constituida por recortes de rostros (Figura 9 - A), articula los rasgos físicos supuestamente característicos de las etnias de los países que componen el mosaico latinoamericano, así como las vestimentas para evocar estereotipos locales. En este caso el uso de las imágenes no tiene una connotación directa con la temática del evento sino, más bien con “lo latinoamericano”.

35El afiche sobre un congreso de musicoterapia presenta una “cadena” de muñequitas con la vestimenta característica de Bolivia (que en este ejemplo es el país convocante) rodeando la silueta cartográfica de la región (Figura 9 - B). En otro afiche (Figura 9 – C), una foto de una niña vestida con sus atuendos típicos y otra foto de un monumento acompañan del lado izquierdo la figura del mapa, ambos representando el país sede del evento, que en este ejemplo es Colombia. En el caso particular del afiche que tiene como título “Los pueblos como vanguardia”, toda la imagen de fondo del afiche está formada por el cuadro llamado Manifestación, del artista plástico argentino Antonio Berni; este cuadro data del año 1934 y su temática principal es la crisis de los años 1930s; el mapa – una sencilla silueta cartográfica en color plano (rojo) –, es usado como un espacio para la escritura donde se indica el nombre del evento (Figura 9 - D).

Figura 9. Personas de distintas etnias y atuendos típicos

Figura 9. Personas de distintas etnias y atuendos típicos

36El afiche que anuncia el Congreso latinoamericano titulado “Posibilidades y desafíos de la familia en Latinoamérica” está formado por una cuadrícula de fotos de familias (Figura 10) y el que promociona el “Encuentro Latinoamericano de gobiernos locales para vivir bien en territorios indígenas, campesinos y comunidades interculturales” está integrado por rostros representantes de los pueblos indígenas (un encuentro de gobiernos locales; Figura 11). A diferencia de otros casos ya mencionados, en estos dos últimos ejemplos las temáticas tratadas en los afiches tienen una relación directa con el recurso de imágenes incorporadas en los mapas.

Figura 10. El mapa está formado por una cuadrícula de fotos de familias

Figura 10. El mapa está formado por una cuadrícula de fotos de familias

Figura 11. El interior del mapa el resto del afiche integrado por rostros representantes de los pueblos indígenas

Figura 11. El interior del mapa el resto del afiche integrado por rostros representantes de los pueblos indígenas

37El afiche de la figura 12, que publicita un “Seminario argentino-chileno”, al igual que un “Seminario del Cono Sur de Ciencias Sociales, Humanidades y Relaciones Internacionales”, recupera el famoso mapa invertido del artista uruguayo Joaquín Torres García y, en el interior de esa silueta, combina una caracterización de las vestimentas con el trabajo y con el uso de recursos. El mapa queda configurado por la yuxtaposición de estos elementos, como si la región misma (o al menos, su identidad) pudiera definirse a partir de estas variables.

38La estética “local”, a veces estereotipada, cumple una función política: establecer un nosotros y un otros que recupere las raíces (en muchos casos, prehispánicas).

Figura 12. Se recupera el famoso mapa invertido del artista uruguayo Torres García

Figura 12. Se recupera el famoso mapa invertido del artista uruguayo Torres García

4.3. Historia y próceres

39La historia es uno de los ejes articuladores de la identidad latinoamericana. Muchos afiches se refieren a la historia mostrando imágenes de líderes latinoamericanos o personajes destacados. En un afiche de la figura 13 (A), que invita a la muestra “Patria Grande, Retratos de figuras latinoamericanas”, ocupan un lugar central y a la derecha del mapa: José de San Martín, Simón Bolívar, Eva Duarte y Ernesto Guevara; en otro afiche de la figura 13 (B), donde se invita a la inauguración de la “Casa Patria Grande, Presidente Néstor Kirchner”, la imagen del mapa está formada casi en su totalidad por la figura de Néstor Kirchner caracterizado como el famoso personaje de historieta el “Eternauta”.4 El caso del “Congreso latinoamericano de trabajo social crítico”, los personajes componen el interior del mapa (Figura 13 - C), en una misma tonalidad: las siluetas de sus rostros, evocan diferentes personalidades de toda la región, como por ejemplo: Ernesto Guevara, José Martí, Hebe de Bonafini, Gabriel García Márquez, Simón Bolívar, Pablo Neruda, Eduardo Galeano etc. (cabe mencionar que la ubicación correspondiente a cada uno nada tiene que ver con su lugar de origen o el país que representan). Tal vez así se quiera demostrar que en realidad le pertenecen a toda la región y no solamente al país de donde proceden. En el caso del afiche sobre el Coloquio de pensamiento político latinoamericano tiene un lugar protagónico el busto de Karl Marx, donde la imagen del mapa aparece plasmada con trazos a mano alzada sobre su torso (Figura 13 - D).

Figura 13. Los próceres y la historia de la región

Figura 13. Los próceres y la historia de la región

40Los “próceres” que se evocan se caracterizan por fuertes convicciones políticas revolucionarias que exceden las historias nacionales y que, más bien, evocan el espíritu libertario que ha sido necesario para la emancipación de la región, desde los tiempos de la colonia hasta la actualidad.

4.4. Las banderas

41Para remarcar que la región es un mosaico de naciones suele recurrirse al uso de un patchwork de banderas, ya sea de cada uno de los países que conforman la región (Figura 14 - A e B) o únicamente del país convocante, donde el país se auto-delimita con su bandera, en este caso la República Argentina (Figura 14 - C). También se recurre a la bandera de los pueblos originarios como abrazo a toda la región y no solo a una delimitación específica de países (Figura 14 - D).

Figura 14. Las banderas de los países e de pueblos originarios.

Figura 14. Las banderas de los países e de pueblos originarios.

42De alguna manera, el tema de las banderas remite a la cuestión de la tensión implícita entre los estados nacionales y la región o, dicho en otros términos, la identidad nacional versus la identidad regional. En la actualidad, la región, además de componer un mosaico de etnias es, ante todo, un mosaico de estados nacionales. Teniendo en cuenta que en la región han primado las identidades nacionales como identidades primarias de los sujetos (por ejemplo, cada uno se identifica primero como argentino y sólo luego como latinoamericano), cabe preguntarse ¿qué tipo de identidad regional se ha construido en torno de América Latina considerando que es un mosaico que articula múltiples territorios nacionales que, a su vez, están conformados por sub-regiones y por “mosaicos internos” de diversa índole?

4.5. Las palabras

43Desde otro ángulo, encontramos la idea de identidad representada a través de palabras que cumplen funciones diversas: a veces son un dibujo en sí mismas, un recurso iconográfico; y otras veces recurren a su valor semántico, tanto a su significado literal como simbólico. Las figuras 15, 16 e 17 (cumbre de poetas, exposición de mapas latinoamericanos y encuentro de historia oral, respectivamente) presentan elementos gráficos y expresiones referidas a temáticas concernientes a Latinoamérica o al evento que publicitan. En de la figura 16, el afiche corresponde a una exposición de mapas latinoamericanos, los países están representados en la conformación del mapa con expresiones que delimitan sus fronteras. En el afiche de la figura 15, que promociona la “Cumbre latinoamericana de poetas, Poesía 200 años después”, el mapa está formado por un conjunto de palabras que configuran la silueta de la región: las palabras no fueron elegidas al azar sino que tienen alguna relación con referentes locales (“Castro”, “Bolívar”), así como también recurre a tópicos que son tomados como característicos de cada zona (“café” e “isla” ubicadas en Centroamérica; “risas” en Brasil). El resto de las palabras que conforman el mapa se ubican de forma aleatoria. Usando estrategias gráficas similares, el afiche del “Encuentro de historia oral, Voces e imágenes de la historia reciente de América Latina” (Figura 17), el nombre del evento en color amarillo conforma la imagen del mapa rodeado de palabras en color blanco relacionadas al evento y referentes de la región: “educación”, “democracia”, “voces”, “familia”, “conflictos” etc.

Figura 15. El mapa está formado por un conjunto de palabras que configuran la silueta de la región

Figura 15. El mapa está formado por un conjunto de palabras que configuran la silueta de la región

Figura 16. Exposición de mapas latinoamericanos. La conformación del mapa son expresiones que delimitan las fronteras

Figura 16. Exposición de mapas latinoamericanos. La conformación del mapa son expresiones que delimitan las fronteras

Figura 17. El nombre del evento en color amarillo conforma la imagen del mapa rodeado de palabras en color blanco relacionadas al evento

Figura 17. El nombre del evento en color amarillo conforma la imagen del mapa rodeado de palabras en color blanco relacionadas al evento

44Más allá de las formas gráficas en las que se disponen las palabras sobre los afiches, se trata de términos que refieren a valores éticos, culturales y políticos que generarían empatía entre la audiencia para los que estos materiales fueron producidos.

4.6. Oposición Norte-Sur

45El tema de oposición norte-sur y la resistencia habla de la voluntad de lograr mantener la independencia de los estados del sur después de haber abandonado el rol de colonias. Aquí se reflejan algunas metáforas de la visión con respecto al norte.

46En el caso del afiche que anuncia la cumbre antimperialista y anticolonialista se muestra la imagen de América del Sur y América Central sobre un globo terráqueo, la mitad celeste y la otra mitad con los colores de la bandera de los Pueblos Originarios (Figura 18 - A). Alrededor del globo se representan cadenas que están rompiéndose y se acompaña con la leyenda que promociona al evento: “Cumbre Antimperialista-Anticolonialista”; como subtitulo se agrega: “Por la soberanía de los pueblos y la vigencia de los Derechos Humanos”. Otros casos no hacen uso de ese repertorio de imágenes, pero representan la misma idea en sus textos, como en el caso de la charla sobre el ALBA y que se subtitula con la leyenda: “Motor de la descolonización y segunda independencia de América Latina” (Figura 18 - B). La imagen del mapa esta realizada por una serie de engranajes imbricados que denotan la figura de América del Sur y América Central. El afiche habla del “imperialismo y las oleadas revolucionarias en América Latina” (Figura 18 - C), y en este caso la imagen del mapa bien puede asemejarse en su interior a un cielo, pero en la gama de colores marrones y amarillos, con dos manos en el centro que convergen ambas, una desde el norte y otra desde el sur, en un sol ubicado en el centro de la imagen. La mano ubicada en el norte representa de alguna forma a América Central y el mapa en América del Sur solo se extiende hasta la mitad de la Argentina.

47El encuentro de químicos que promociona un afiche de la figura 18 (D) es muy elocuente respecto de las disparidades entre el norte y el sur; sin embargo, no sólo remarca esa disparidad sino que plantea un discurso crítico sobre la base de la idea de que es necesario “verter” parte de los beneficios que se acumulan en la América boreal hacia la septentrional: Estados Unidos y Canadá están representados como una burbuja de vidrio que contiene un líquido químico azul que, al derramase hacia “abajo”, da forma al mapa de América del Sur, compuesta por una figura de pieza única en azul plano.

Figura 18. La oposición Norte-Sur

Figura 18. La oposición Norte-Sur

48En los afiches analizados que tematizan la tensión norte-sur, América latina es encarnada en una figura cartográfica que se construye o se articula con otros elementos gráficos para hablar de la identidad de la región: etnias, atuendos típicos, recursos naturales, banderas, próceres y figuras destacables y origen común evocado en la tierra y las raíces son algunos de los tópicos que configuran el entramado del ideal de una identidad latinoamericana.

4.7. La unidad

49La idea de unidad latinoamericana, fraternidad y hermandad son tópicos recurrentes que muchas veces recurren a las estrategias gráficas mencionadas en los apartados anteriores. El concepto de unidad regional se ve reflejado en el uso de manos entrelazadas o abiertas dispuestas a unirse. En la figura 19, sobre el encuentro de ideas y practicas feministas latinoamericanas, se representa la región con el Caribe incorporado físicamente y dos mujeres tomadas de la mano con una bandera corriendo libremente. En el caso de la figura 20 (sobre un encuentro de artistas que promueven la no violencia) se recurre al uso de las manos que se encuentran abiertas detrás de la silueta del mapa como símbolo de paz.

Figura 19. Sobre el mapa dos mujeres tomadas de la mano con una bandera corriendo libremente

Figura 19. Sobre el mapa dos mujeres tomadas de la mano con una bandera corriendo libremente

Figura 20. Se recurre al uso de las manos que se encuentran abiertas detrás de la silueta del mapa

Figura 20. Se recurre al uso de las manos que se encuentran abiertas detrás de la silueta del mapa

50La noción de unidad también está mostrada con la gráfica de redes que conectan puntos sobre el mapa, como en el caso de un afiche sobre un encuentro de universidades por el emprededurismo social en la figura 21 (A). En este ejemplo, el mapa está formado por puntos conectores unidos con líneas que delimitan la silueta de la región.

51En otro afiche de la figura 21 (B), sobre un congreso de prácticas estratégicas, tiene un apartado a la derecha del mapa que hace mención a las “topias entramadas para trazar tierras liberadas” y en el margen izquierdo de color verde sólido se muestra el mapa de Latinoamérica, puntos de igual tamaño y color que representan capitales o ciudades (la única excepción es el círculo que representa el lugar donde se realizará el Congreso, que aparece en color violeta); los puntos están unidos por líneas punteadas que evocan rutas conectoras. Los puntos nodales y los segmentos que unen esos nodos enfatizan la idea de conexión, como si la región se articulara de manera bien comunicada.

52En el caso del festival latinoamericano de instalación de software libre (Figura 21 - C) la región está definida como una pieza única, delineada por la forma que crea el cable del mouse. De manera similar, en el poster del Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Paisaje (Figura 21 - D), los trazos simples articulan la silueta cartográfica de la región, pero en este caso se utilizan cuatro colores para marcar las diferentes subregiones: América del sur con rojo, Centroamérica con amarillo, México con verde y Caribe con azul.

Figura 21. La unidad de la región y sus conexiones

Figura 21. La unidad de la región y sus conexiones

53La falta de fronteras internas, diseños que remarcan la entidad de la región como un bloque en sí misma y la interconectividad de las partes que constituyen la región son algunas de los tópicos que se buscan representar gráficamente para comunicar la unidad como un valor identitario.

4.8. La potencialidad de la región: una esperanza ante la imagen del subdesarrollo

54Otro tema recurrente son los recursos naturales, que son interpretados al mismo tiempo como la riqueza potencial de la región para alcanzar un desarrollo sustentable y autónomo o como una alerta al uso o explotación desmesurada por parte de algunos sectores nacionales y extranjeros. En el afiche del “Congreso latinoamericano de reservas privadas y de pueblos originarios” (Figura 22 - A), el interior de la silueta del mapa está compuesto por fotos y dibujos de los recursos naturales y humanos de la región. En los afiches de la “Conferencia sobre energía solar” y del “Congreso de bioética” (Figura 22 - B e C), las fotos de los recursos se encuentran en los márgenes la imagen del mapa desde afuera (en un se muestran saliendo en forma de prisma desde el país convocante a la conferencia, que en este caso es Perú; en otro acompañan al mapa tres fotos de Viña del Mar, que es la ciudad sede del congreso). En el caso del afiche que convoca al “Seminario Internacional sobre recomposiciones territoriales de las periferias de las metrópolis andinas”, el mapa está formado por un collage de fotos de las regiones urbanas periféricas andinas que evoca elocuentemente tanto el tema del evento como la problemática del subdesarrollo (Figura 22 - D).

55Los afiches que aluden a los problemas económicos, ambientales y sociales forman parte de encuentros que proponen discutir soluciones alternativas y, a pesar de tratarse de temáticas conflictivas, parecen buscar poner en marcha la potencialidad de la región en todos los aspectos que contribuyan a mejorar las condiciones sociales.

Figura 22. Los recursos naturales y el subdesarrollo

Figura 22. Los recursos naturales y el subdesarrollo

5. Entonces, ¿de qué hablamos cuando hablamos de América latina? La imagen proyectada es también un proyecto

56Los temas que evocan los mapas de la región son tan variados como autores de estos se presentan. Dentro del abanico podemos mencionar: festivales de música, convocatorias y muestras de arte, exposiciones, actos políticos, simposios, coloquios, asambleas partidarias, concursos fotográficos y de moda, cátedras libres referidas a líderes políticos, inauguraciones de casas regionales, cumbres de tenores políticos e ideológicos, talleres, jornadas. Pero sin duda los más importantes en cuanto a presencia de convocatorias por las cantidades conformantes del corpus de imágenes analizadas son los encuentros y los congresos, seguidos de las conferencias y los seminarios. Los primeros tienen la particularidad agregar la especialidad del evento en cuestión. Esto significa que además de ser encuentros o congresos de disciplinas específicas, mencionan atributos como por ejemplo “Encuentro Latinoamericano” o “Congreso Nacional”, “Encuentro Iberoamericano”, etc. Los seminarios remarcan, además del anuncio específico, la categoría de “Internacional”. Tal vez por eso no mencionan ninguna nacionalidad y referencia geográfica, y, en cambio, predomina el tipo de temática abordada – como por ejemplo “Multinacionales y energía”, “Uso de energía solar”, “Aborto en América Latina” etc. Las conferencias y seminarios representan el 16 % del total de la muestra, mientras que los encuentros y congresos superan la mitad del total con un 56%.

57Sin duda, este perfil institucional de los afiches está condicionado por el entorno de selección de la muestra. Sin embargo, cabe mencionar que durante los años que se extendió esta investigación no se han identificado otros ámbitos ni otros tipos de afiches que utilicen de manera significativa la referencia a lo latinoamericano como marca de identidad. Esta constatación nos lleva a imaginar que, además de lo que proponía Rouquié (1990), América latina es algo que se evoca con intenciones específicas, generalmente de cortes políticos y contestatarios, haciendo un uso selectivo de las tradiciones que se pueden reconocer en sus topónimos y en sus formas. En todos los casos se trata de lograr que el público consumidor de estos afiches se identifique con la imagen ofrecida.

58Como pudimos apreciar no se puede representar de la misma manera a todos los integrantes de la región porque entraríamos en una de las tantas contradicciones a las cuales ya nos sometemos para tratar de definirla como tal. Se intenta demostrar con el uso de imágenes una noción plural de Latinoamérica; notamos que, para plasmarlo, se recurre a un ensamblado de objetos de denoten el conglomerado que caracteriza a la región.

59Además de utilizar mapas que representen la región se recurre al uso de elementos que la definan, colores que la sostengan y leyendas que la ratifiquen.

60A pesar de esa heterogeneidad, encontramos una serie de patrones comunes que configurarían esa identidad regional: la cuestión de unidad regional e independencia, el ensamblaje aparentemente armónico nación-región, la hermandad entre los pueblos, los desafíos comunes que enfrentan los miembros de la región, la necesidad de cierta fortaleza y resistencia para afrontar los cambios y la educación como baluarte para la transformación.

61Teniendo en cuenta que estos temas forman parte de la agenda académica y política como asuntos a discutir y considerar, las cuestiones mencionadas en el párrafo precedente parecen encuadrarse más en el orden del proyecto que de la realidad. En tanto son problemáticas y asuntos abiertos al debate y a propuestas transformadoras, es posible identificar el temario de tópicos que identifican la región como un imaginario geográfico deseado (al menos por un segmento de la población que, por cierto, es bastante específico).

6. Reflexiones finales. Leer entre líneas la identidad de la región. Resistencia, Transformación y Fraternidad

62La región de América latina presenta un territorio caracterizado por el mestizaje. El aporte realizado por García Canclini es el de haber introducido el concepto de hibridez, entendida como una fusión de relaciones culturales en el marco de la modernidad. Al respecto menciona que “la palabra hibridación aparece más dúctil para nombrar no solo las mezclas de elementos étnicos o religiosos, sino con productos de las tecnologías avanzadas y procesos sociales o posmodernos” (García Canclini, 2012: 22).

Nuestras divisiones son puramente políticas y por tanto convencionales. Los antagonismos, si los hay, datan apenas de algunos años y más que entre los pueblos, son entre los gobiernos. De modo que no habría obstáculo serio para la fraternidad y la coordinación de países que marchan por el mismo camino hacia el mismo ideal. Sólo los Estados Unidos del sur pueden contrabalancear en fuerza a los del Norte. Y esa unificación no es un sueño imposible. (Ugarte, en Galasso, 2012: 23)

  • 5 Manuel Ugarte (1875-1951) fue un escritor, diplomático y político argentino.

63Podemos percibir en las imágenes que integran el corpus que muchas de ellas representan a algunos de estos tópicos mencionados en los dichos de Manuel Ugarte.5 Cuando se nombra los “Estados Unidos del sur contra la fuerza de los del norte” estamos hablando de una resistencia, de la voluntad de lograr mantener una independencia de los estados del sur, de abandonar el rol de colonias o, en palabras de Ugarte, “la opresión imperialista”. En un afiche de la figura 18, que ya hemos comentado, nos refleja alguna metáfora de nuestra visión con respecto al norte; allí se muestra que desde un balón se vierte un líquido de color celeste que va conformando el mapa que representa América del Sur hasta México y el Caribe. Parece sugerir el trasvasamiento de saberes, técnicas y ciencia desde el Norte hacia el Sur.

64El resto de los símbolos que denotan la resistencia latinoamericana consiste en el uso de puños cerrados, brazos extendidos, torsos y cuerpos saliendo desde el interior de la tierra demostrando fuerza y libertad. En cuanto a la unidad de los pueblos de la región, Ugarte plantea la siguiente metáfora:

Supongamos que la América de origen español es un hombre. Cada república un miembro, una articulación, una parte de él. La Argentina es una mano. La América Central es un pie. Yo no digo que porque se corte un pie deje de funcionar la mano. Pero afirmo que después de la amputación, el hombre se hallará menos ágil y que la mano misma, a pesar de no haber sido tocada, se sentirá disminuida con la ausencia de un miembro necesario para el equilibrio y la integridad del cuerpo. (Ugarte, en Galasso, 2012: 50)

65Este discurso fue pronunciado en 1922. A partir de allí apareció una serie de relatos latinoamericanistas que reivindicaban la unidad de la región como uno de los motores fundamentales de la sociedad y como una ambición utópica de los países que la conforman. Ya mencionaba Ugarte también, que la diferencia que tenían los países del norte con los del sur era el desarrollo individual en su máximo potencial y la unidad de los mismos en tanto camino social y político a seguir.

Mientras en el norte, las trece ex-colonias inglesas se unificaron, desarrollaron sus industrias y se expandieron constituyendo una nación pujante y próspera y a tal punto poderosa que ha devenido en imperialista, al sur del río Bravo las colonias españolas se desmembraron en veinte países, la mayoría de los cuales no desarrollaron sus potencialidades y están todos, sojuzgados o en camino de serlo. (Galasso, 2012: 35)

66No solo se hace referencia a la unidad con las imágenes sino también con las leyendas que las acompañan. En el caso del afiche sobre el Encuentro con los embajadores del ALBA (Figura 23 - A), se hace mención a un fin promocionando la “unidad de los pueblos de América Latina frente al imperialismo”; en el afiche sobre los movimientos sociales “hacia el ALBA” se hace mención a la “unidad e integración de Nuestra América” (Figura 23 - B), incluso apelando indirectamente al mapa invertido de Torres García como marca de rebeldía o de subversión respecto del orden establecido (algo que, en efecto, está en la propuesta del ALBA). Otro de los temas a los que se evoca cuando se hace mención a la región latinoamericana es a la transformación, en referencia a lo político, a lo social y a lo económico, con una cierta proyección histórica en cada caso. Se asocia habitualmente al cambio social y a la educación popular. Podemos englobar en este tópico a la acción, la construcción y la transformación como signos de movimientos y cambios en las sociedades de Latinoamérica.

67En algunos casos podemos encontrarlos simplemente como una expresión de deseo. En algún caso, esa expresión de deseo parece ser viable a través del “cambio social” fomentado a través de la educación. En otro sentido se intenta marcar un camino a seguir, también en torno a la educación, tal como se menciona en otro afiche de la figura 23 (C) (sobre un congreso de educación), “hacia un movimiento pedagógico latinoamericano”. El caso emblemático que encontramos para hacer referencia a este tópico de la transformación lo podemos observar en un afiche, también sobre un encuentro de educación, que explícitamente hace referencia a una transformación – tanto en imagen como en la leyenda –, a un crecimiento y la acción, representado en el entramado que forma la imagen del mapa, donde asoman desde adentro a través de las raíces las caras representado a las sociedades (Figura 23 - D). La leyenda que acompaña esta imagen dice “Crece desde el pie” y el subtítulo alude explícitamente a la capacidad transformadora que se le atribuye a la educación: “Educación para una Latinoamérica que se transforma”.

Figura 23. La América Latina: unidad y transformación

Figura 23. La América Latina: unidad y transformación

68Como se puede observar en los casos mencionados la transformación, el cambio y el camino a seguir están en manos de la educación. En este sentido es relevante resaltar la inserción de la idea de la educación para la sociedad a través de una pedagogía crítica incorporada de la mano del educador brasileño Paulo Freire (1921-1997). La idea era despertar conciencia sobre las posibilidades del mundo para que en lugar de conformarse puedan transformar sus vidas. Ya en su idea popularmente conocida que dice “el mundo no es, el mundo está siendo” (Freire, 2008: 35) deja explicito el permanente cambiar y transformarse al que se sumergen constantemente las sociedades. En efecto, educación y transformación ha sido una relación que se ha presentado en todos los afiches analizados para este tópico, como si fueran las claves para resolver siglos de opresión. Así lo expresó Paulo Freire: “La capacidad de aprender, no solo para adaptarnos sino sobre todo para transformar la realidad” (Freire, 2008: 32).

69Más allá de la promoción gráfica de valores atribuidos al carácter de la región y sin ahondar acerca de su naturaleza realista o proyectiva, tal vez pueda construirse algún tipo de identidad latinoamericana que trascienda el discurso, ya sea gráfico o ideológico cuando se examinen críticamente los procesos que configuran la historia y el presente de una región tan grande y compleja.

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Bibliografia

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Notas

1 Con preguntas afines a las que desarrollamos en este trabajo, Alfredo Guerrero Tapia analizó el imaginario sobre América latina que puede encontrarse en la mirada mexicana analizando mapas e indagando por ejemplo, qué representan y qué sentido tiene la imagen de América Latina hoy (Tapia, 2007). Posiblemente el imaginario social denote una intención de homogeneidad cultural, plasmado en imágenes simbólicas representativas de hechos históricos o de la idiosincrasia del pueblo al que se representa.

2 El corpus de imágenes consta de un total de 109 mapas que aparecen en afiches que promocionan eventos, recolectados entre los años 2008 y 2013 en la ciudad de La Plata, aunque también se incorporaron algunas imágenes recibidas por correo electrónico. Debido a que asumimos como premisa que la apelación al imaginario latinoamericano prima en asuntos académicos y políticos, la fuente privilegiada para la recolección de materiales fue la Universidad Nacional de La Plata. Dentro de la cantidad de imágenes obtenidas en la UNLP, podemos disgregar por facultades o dependencias de la Universidad, y de esta manera encontramos los siguientes marcadores: en primer lugar, se ubica la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación con un total de 33 imágenes que representan el 50 % de las 65 imágenes correspondientes a la UNLP. En segundo lugar, un conjunto formado por once facultades (Ciencias Jurídicas y Sociales, Informática, Ciencias Agrarias y Forestales, Ingeniería, Arquitectura y Urbanismo, Ciencias Económicas, Ciencias Naturales, Ciencias Exactas, Ciencias Médicas, Bellas Artes, Periodismo y Ciencias de la Comunicación) representan aproximadamente el 32 % correspondientes a la UNLP, con un total de 21 imágenes. En tercer lugar, con un 11 % sobre el total, encontramos a la Facultad de Psicología con 7 imágenes obtenidas. En cuarto y último lugar representados con el 6 % se encuentran la sede del Rectorado de la UNLP y el gremio docente ADULP, con 4 imágenes.

3 Libro del escritor uruguayo Eduardo Galeano publicado en 1971 y que tuvo decenas de ediciones.

4 Historieta argentina de ciencia ficción creada por Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López. Fue publicada originalmente en 1957 y tuvo gran cantidad de reediciones.

5 Manuel Ugarte (1875-1951) fue un escritor, diplomático y político argentino.

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Índice das ilustrações

Título Figura 1. Topónimos de la América Latina
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-1.png
Ficheiros image/png, 1,7M
Título Figura 2. Topónimos: América Latina y Caribe
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-2.png
Ficheiros image/png, 2,2M
Título Figura 3. Remarcación física del país convocante
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-3.png
Ficheiros image/png, 201k
Título Figura 4. Delimitación física y color uniforme
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Ficheiros image/png, 548k
Título Figura 5. Brazos, puños, manos y raíces latinoamericanas
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-5.png
Ficheiros image/png, 3,8M
Título Figura 6. La mano simboliza el mapa que surge desde las raíces
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Ficheiros image/jpeg, 1,2M
Título Figura 7. Desde el sur, brazos estirados son la base del mapa
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-7.jpg
Ficheiros image/jpeg, 1,4M
Título Figura 8. Las manos apoyadas en el vientre representan el mapa de la región
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Ficheiros image/jpeg, 664k
Título Figura 9. Personas de distintas etnias y atuendos típicos
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-9.png
Ficheiros image/png, 1,7M
Título Figura 10. El mapa está formado por una cuadrícula de fotos de familias
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-10.jpg
Ficheiros image/jpeg, 188k
Título Figura 11. El interior del mapa el resto del afiche integrado por rostros representantes de los pueblos indígenas
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Ficheiros image/jpeg, 60k
Título Figura 12. Se recupera el famoso mapa invertido del artista uruguayo Torres García
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Título Figura 13. Los próceres y la historia de la región
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Ficheiros image/png, 6,9M
Título Figura 14. Las banderas de los países e de pueblos originarios.
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-14.png
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Título Figura 15. El mapa está formado por un conjunto de palabras que configuran la silueta de la región
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Ficheiros image/jpeg, 116k
Título Figura 16. Exposición de mapas latinoamericanos. La conformación del mapa son expresiones que delimitan las fronteras
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Ficheiros image/jpeg, 56k
Título Figura 17. El nombre del evento en color amarillo conforma la imagen del mapa rodeado de palabras en color blanco relacionadas al evento
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Ficheiros image/jpeg, 416k
Título Figura 18. La oposición Norte-Sur
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Título Figura 19. Sobre el mapa dos mujeres tomadas de la mano con una bandera corriendo libremente
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Ficheiros image/jpeg, 640k
Título Figura 20. Se recurre al uso de las manos que se encuentran abiertas detrás de la silueta del mapa
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Ficheiros image/jpeg, 236k
Título Figura 21. La unidad de la región y sus conexiones
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Ficheiros image/png, 4,7M
Título Figura 22. Los recursos naturales y el subdesarrollo
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-22.png
Ficheiros image/png, 8,2M
Título Figura 23. La América Latina: unidad y transformación
URL http://journals.openedition.org/terrabrasilis/docannexe/image/4940/img-23.png
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Para citar este artigo

Referência eletrónica

Nelsa Grimoldi, « ¿Imaginarios Imaginados? », Terra Brasilis (Nova Série) [Online], 12 | 2019, posto online no dia 29 dezembro 2019, consultado o 15 março 2021. URL : http://journals.openedition.org/terrabrasilis/4940 ; DOI : https://doi.org/10.4000/terrabrasilis.4940

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Autor

Nelsa Grimoldi

Licenciada en Geografía. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación
Universidad Nacional de La Plata (Argentina).

Artigos do mesmo autor

  • Progresión, criterios y problemas en los planes de relvamiento topográfico de la República Argentina durante el siglo XX
    Publicado em Terra Brasilis (Nova Série), 4 | 2015
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Direitos de autor

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